Cosas a tener en cuenta respecto a las botas para esquiar:
- La gran mayoría de las botas de esquí son de plástico duro o muy rígido , pero hay que tener en cuenta la elasticidad frontal y una correcta sujeción al pie y al tobillo.
- Cuantos más cierres tenga la bota, más se ajustará la bota a tu pie.
- Las botas están hechas de dos partes, la cubierta y la parte acolchada del interior, llamado botín, que debe ser fácilmente extraíble, para poder sacarlo de la bota y secarlo sin dificultad.
- Hay que asegurarse bien que nuestro peso esté de acuerdo con la dureza de la bota, una bota demasiado blanda no puede con un peso elevado, la presión que ésta soporta cuando descendemos, acabará deformándola dando menor sujeción al pie.
- Es también muy importante que tengamos en cuenta nuestro nivel de esquí:
- botas de iniciación: Son botas muy resistentes, ligeras, cómodas y fáciles de manejar
- botas de nivel medio: Hay mucha variedad de botas dentro del nivel medio. Entre ellas podemos encontrar las que dan prioridad a la comodidad y a la sujeción del pie y las que prefieren las ventajas técnicas.
- El número de la bota siempre es igual al número de tu zapato.